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Si te preguntas qué es EL hábito fantástico, en primer lugar debes saber que se trata del método Montessori el cual ha tenido gran popularidad en los últimos tiempos. Sin embargo, muchas personas aún desconocen en qué consiste, cómo se desarrolla y qué engloba. La verdad es que la respuesta puede variar dependiendo de a quién se le pregunte.

Algunos dirán que el método Montessori solo se enfoca en la educación, mientras que otros mencionarán que también abarca la vida familiar. En mi experiencia, creo que el método Montessori va más allá de la pedagogía, ya que también enseña a mirar la vida de una manera diferente y a tener un enfoque más general.

Este método fue creado por María Montessori, una doctora que comenzó trabajando en un hospital mental para niños y, a través de la observación diaria de los niños, descubrió que tenían potencialidades y que al conocer cómo desarrollarlas, podrían aprender más. Además, descubrió que los niños aprendían mejor a través del contacto, el tacto y la manipulación de objetos.

María Montessori desarrolló un vínculo perfecto entre el amor, el ambiente y la relación del niño con el ambiente. El amor se manifiesta a través del respeto, la libertad con límites y la confianza que se les transmite a los niños. Gracias a la observación detallada de cada niño se pueden conocer sus necesidades, intereses y características individuales.

Cinco principios importantes del método Montessori

1. «Cualquier ayuda innecesaria es un obstáculo al desarrollo»

Esta frase habla sobre la importancia de tener confianza en el niño y dejarlo desarrollarse en sus actividades. El adulto solo es importante en la presentación de una actividad, pero durante el desarrollo, se le debe dar mayor importancia al niño. El éxito de un buen profesor es poder hacer que los niños trabajen como si él no existiera.

2. «El niño aprende por sí mismo»

Después de una presentación adecuada, el niño trabaja libremente dentro de unos límites y con la confianza de que, si algo va mal, el adulto intervendrá para redirigir la actividad. Se genera una observación y una interacción entre los niños en la que no es necesaria, muchas veces, la intervención del adulto.

3. «El niño se siente seguro»

El niño deja de buscar aprobación en cada paso que da, lo que le otorga seguridad en sí mismo. Esto se logra a medida que se le transmite la confianza necesaria y se les da libertad dentro de unos límites.

4. «Sembrar ideas buenas en la mente del niño»

Es esencial transmitir a los niños la bondad y belleza del mundo, en lugar de lo negativo. La vida se encargará de mostrarles lo negativo, pero criándolos en la bondad y lo bello, se les educa para vivir en un mundo más pacífico y armónico.

5. «Educar para la paz»

La educación debe ser para la cooperación y la solidaridad, no para la competencia. La idea es enseñar a relacionarnos de manera más humilde, más bondadosa y más respetuosa con los demás, las plantas, los animales y, en general, con el mundo.

En próximos artículos ampliaré más sobre el método Montessori. Si te ha gustado, no dudes en compartirlo y ponerlo en práctica.

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