Bienvenidos al monte sur, hoy vamos a hablar sobre la importancia de decir «no». A muchos niños les cuesta decir esta palabra y otros la dicen con facilidad. En su infancia, los niños tienen un momento en el que dicen «no» a todo y los adultos deben respetarlo porque es una fase necesaria en su vida. Les permite medir el mundo exterior y saber en qué situaciones pueden decir que no, además de sentir que tienen voz y voto.
Sin embargo, día a día, muchos padres, educadores, profesores y cualquier persona en contacto con niños, tienen dificultades para decir que no en situaciones donde es necesario hacerlo. Es importante encontrar el equilibrio entre decir «sí» y «no», los adultos deben ver al niño como el adulto en construcción que será y relacionarse con ellos de manera respetuosa.
Antes de decir «sí», «no» o «tal vez», es recomendable analizar la petición y nosotros mismos. En lugar de decir «no» sin más, debemos pensar si lo que nos pide el niño es realmente innecesario o si se lo merece. Si lo vemos como el adulto en construcción que es, le daremos más respeto, lo que repercutirá en su autoestima y seguridad. Debemos siempre estar en mejora continua para dar lo mejor a los niños que están en contacto con nosotros.
Recuerda, no es ni lo más indicado decir «sí» a todo, ni lo mejor decir «no» a todo. Encontrar el equilibrio es la clave. Démonos el tiempo de analizar las situaciones y dar respuesta a los niños de manera respetuosa y justa. Sigamos aprendiendo juntos.